domingo, 1 de febrero de 2015

CONCURSO CUENTO MEDIO AMBIENTAL

Ya hemos participado en el concurso que hace unos días os comentamos de: "Los profes cuentan 4".

Pero... hasta el 10 de Marzo tendremos que esperar a ver si el nuestro resulta entre los 10 mejores, para nosotr@s si!

 Aunque... el jurado tiene la palabra

http://www.amarilloverdeyazul.com/category/losprofescuentan/
(pincha para más info)

Este es el cuento en el que tod@s hemos colaborado y con el que hemos participado



RECICLADEJO
Había una vez, en un lugar llamado Recicladejo, un castillo en el que vivía un Rey al que todos llamaban el Arbolista. Le nombraron Rey de este pueblo porque cuidaba del medio ambiente mejor que nadie y protegía a la Tierra maravillosamente bien.
 A estas tareas, le ayudaba su amigo Calabazón que era el encargado de regar las plantas y cuidar de los animales, también reforestaba los bosques y enseñaba a los vecinos de Recicladejo a reciclar, separar y reutilizar todos aquellos residuos que generaban.
Cada mañana, cuando Cohetín encendía el horno de la panadería, Calabazón se despertaba con el humo de la leña y después de desayunar las riquísimas tortitas que Cohetín le prepara, recogía a los Brigadistas Verdes para que juntos, vigilaran el pueblo y pudieran mantenerlo limpio. Calabazón sabía separar los residuos muy bien, había aprendido de su maestro que fue el que todos conocían como el Arbolista, el Rey Arbolista.
Pero…un día muy soleado llegaron unos turistas de excursión a Recicladejo y… ¡aaaaahhh!, no conocían las leyes de Recicladejo y…pisaban las plantas, tiraban al suelo los zumos, el envoltorio de las magdalenas así como los envases, los depositaban en el contenedor azul, las cáscaras de plátano en el amarillo, etc. Los vecinos salieron a la calle para recibirles con gran alegría y emoción, pues desde hacía mucho tiempo nadie nuevo pasaba por aquel lugar, pero… cuando vieron todo aquel desastre se pusieron muy tristes ya que todo su esfuerzo no se estaba respetando. Entre todos los vecinos decidieron contarles cómo se sentían después de lo sucedido.
Los turistas quedaron sorprendidos, les dijeron a los vecinos del pueblo que no tenían ni la más remota idea de que en ese pueblo se cuidaba el medio ambiente de esa forma y tan bien. El Rey convocó a todos los turistas para darles la bienvenida y contarles las costumbres y gastronomía así como las leyes de Recicladejo, éstos aprendieron a separar, reutilizar, reciclar y mantener su ciudad limpia y cuidada y así entendieron que siguiendo los pasos de los vecinos de Recicladejo vivirían mejor. Los turistas estaban asombrados y muy agradecidos por sus enseñanzas.
A la mañana siguiente era el turno de los turistas, tenían que presentar a los vecinos de Recicladejo el funcionamiento de su ciudad de origen. Allí en el contenedor amarillo se depositaba el papel y el cartón, en el azul los plásticos y los envases y en el morado  la ropa y las zapatillas y en el rosa lo orgánico.
Tanto los turistas como los vecinos de Recicladejo descubrieron su amor por el medio ambiente, pero en cada ciudad llevado a cabo de forma diferente. Todos aprendieron de las ideas de la otra ciudad y modificaron algunas de sus costumbres. Los vecinos de Recicladejo empezaron a vaciar sus armarios de ropa y zapatos para depositarlo en un contenedor morado y poder dárselo a aquellos que lo necesitaran y los turistas dejaron de pisar las plantas y comenzaron a darle la importancia que estas merecen para que sus jardines y terrazas fueran tan bonitos como los de Recicladejo y de esta forma pudieran tener y reunirse alrededor del árbol conocido en toda la comarca, el que tanto les gustó a los turistas, el que representaba a Recicladejo y estaba presente en todas sus reuniones y fiestas, el árbol de la amistad, del amor y de la alegría.

No hay comentarios:

Publicar un comentario